Historia
La Parroquia de Santa Agnès, ubicada en el barrio barcelonés de Sant Gervasi, se formó de la separación territorial de la antigua parroquia de los santos Gervasio y Protasio, en la plaza de la Bonanova, parroquia madre de todas las del barrio y actual sede del arciprestazgo de Sant Gervasi.
En la actualidad, la afluencia de fieles a la parroquia supera los 2.000 feligreses semanales, el 50% en misas dominicales y el resto en celebraciones eucarísticas a lo largo de la semana. Con la colaboración del asistente social primero y con un amplio equipo de voluntarios que se ha formado en los últimos años, se ayuda a varias familias necesitadas, a más de 1.000 personas en la actualidad, tanto del barrio como de otros puntos de la ciudad. También se ha iniciado el apoyo a personas sintecho y mujeres en situación vulnerable. El dinamismo actual de los equipos colaboradores de la parroquia ilusiona a todos los que formamos parte de ella y es la que hace posible no solo que estas tareas se consoliden, sino que sigan creciendo y ampliándose en los próximos años.
2021. La parroquia logra mantenerse abierta durante dos semanas críticas previas a la Semana Santa, en las que la presencia de la COVID obliga a confinarse a los sacerdotes y al sacristán. Varios sacerdotes, cardenal arzobispo de Barcelona incluido, y feligreses se prestan a ayudar para que la actividad dominical continúe sin que se altere el horario de las misas y confesiones.
Se ordenan las diversas actividades pastorales de la parroquia que están en marcha y se estructuran en cuatro grandes áreas: Liturgia, Acción social, Evangelización y Discipulado.
Se incorpora un gran panel en el lateral de la Iglesia para lanzar mensajes a la feligresia, Se renueva el logotipo y Se crea de una nueva página web.
En otoño se retoman los retiros de Emaus, suspendidos durante la pandemia, y se preparan las siguientes cenas Alpha.
2020. El inicio de la pandemia lleva a la parroquia a retransmitir las misas online a través de YouTube y a repartir la comunión en hogares de los feligreses a través de los ministros extraordinarios de la comunión. Se mantiene el sacramento de la reconciliación para los fieles que se acercan a la iglesia a partir del momento en que empiezan a flexibilizarse las restricciones. Se organizan equipos de voluntarios para ordenar el acceso y controlar el aforo en el interior del templo y se amplían los horarios de las misas para atender a la feligresía.
Se aprovechan los meses de cierre de la iglesia para llevar a cabo las obras pendientes de pintura del templo y para renovar su iluminación. Se procede a rehabilitar y a reabrir el coro de la iglesia.
Se introducen medios telemáticos para hacer aportaciones económicas, como Bizum o una terminal de TPV en la propia parroquia y se potencia la aportación a través de la domiciliación y transferencia bancaria.
A la vuelta del verano, Mn Beto Sols comienza un Curso de Biblia online que en su primer curso tiene por objeto el Pentateuco. A partir del mes de octubre se inicia un nuevo programa de formación a través de grupos pequeños, de los que se constituyen ocho y empiezan a reunirse en hogares con una periodicidad mínima mensual.
Acción social, recoge más de 50.000 kilos de comida que se hacen llegar a hogares necesitados. A través de Hogar de María se atiende en la parroquia a madres que deciden seguir adelante con su embarazo a pesar de las dificultades que les rodean. Empieza la actividad Cors savis, cors forts que con un amplio equipo de voluntarios enfoca su actividad hacia las personas mayores del barrio y de la parroquia, por medio de acciones como el envío de cartas personalizadas, campañas específicas en determinadas festividades y conexión con la pastoral de la salud para atender necesidades de atención de personas que están solas o que necesitan asistencia puntualmente.
En este año fallece Mn.Pares, colaborador de la parroquia durante los últimos años y que oficiaba misas durante la semana, pasando a estar en la Gloria del Señor.
2019. Las cenas Alpha y los retiros de Emaús se consolidan como herramientas eficaces de nueva evangelización en la parroquia. Se introduce y da inicio el programa de Proyecto de Amor Conyugal con varios matrimonios de la parroquia.
Se instauran programas de acción social del mercadillo solidario y la operación kilo y se reorganiza el ropero de la parroquia. Las siervas de San José empiezan a atender a personas de la calle. El Taller de la Santa Cruz empieza a reunirse semanalmente en la parroquia y lleva a cabo labores de apoyo a varias iniciativas de carácter social y a comunidades religiosas, y de necesidades de la parroquia.
Mn Carlos Bosch es ordenado sacerdote de la Diócesis y deja la parroquia para incorporarse a su nuevo destino en la parroquia de Sant Miquel dels Sants de Barcelona, en el barrio de Gràcia.
Entre los meses de septiembre y octubre la parroquia prepara a trece feligreses como nuevos ministros extraordinarios de la comunión, y son nombrados en el mes de diciembre por el Cardenal Arzobispo Juan José Omella pasando a reforzar el apoyo durante las celebraciones eucarísticas, así como la labor de la Pastoral de la Salud en residencias y hogares de feligreses que no pueden asistir a Misa.
2018. Se llevan a cabo los primeros retiros de Emaús para hombres y para mujeres de la parroquia.
2017. Se mantienen las adoraciones de alabanza. Entre los meses de octubre y diciembre se organizan las primeras cenas Alpha de la parroquia.
2016. Se inician las adoraciones de alabanza de jóvenes universitarios, jóvenes profesionales y de adultos, los lunes, miércoles y jueves de cada semana durante el curso.
En el Curso 2016/2017 Se inician los programas Edge y Lifeteen para adolescentes y jóvenes.
2015. El seminarista Beto Sols, adscrito a la parroquia de Santa Agnès, es ordenado sacerdote y pasa a ser vicario de la parroquia.